La muerte despierta dudas, temor y curiosidad casi por partes iguales. Asomarse al lugar donde se encuentran los que ya no están constituye una experiencia especial. Obras de arte arquitectónicas, esculturas, arqueología, historia y personajes ilustres: todo eso se condensa en el Cementerio de la Chacarita.
El Cementerio de la Chacarita tiene su origen en la gran epidemia de fiebre amarilla que afectó a la ciudad de Buenos Aires en el año 1871. Desde aquellos tiempos hasta la actualidad se convirtió en el cementerio más extenso y utilizado de la ciudad. Está ubicado en medio del barrio que le da nombre y recibe cada año a cientos de visitantes y turistas que se pierden en su tranquilidad, sus joyas artísticas y que visitan las tumbas de celebridades y personalidades, testigos de la vida cultural porteña.
Aquel turista que quiera recorrer este particular paseo puede visitar las tumbas de personajes tan ilustres como Aníbal Troilo, Adolfo Pedernera, Benito Quinquela Martín, Luis Sandrini, Norberto Napolitano (Pappo) y Alfredo Alcon, entre tantos otros.
Para conocer leyendas, mitos e historia del Cementerio se puede participar de las visitas guiadas gratuitas. Se realizan el segundo y cuarto sábado de cada mes, a las 10 horas; el recorrido dura aproximadamente una hora. Tener en cuenta que se suspenden por lluvia.
Estas visitas por el mítico lugar no tienen un precio fijo, sino que al finalizar cada persona entrega al guía el importe que considere en función de su satisfacción.